“ANDREA: Desgraciado el país que no tiene héroes.
GALILEO: No, desgraciado el país que los necesita.”
Son los parlamentos del cuadro 13 de la obra teatral GALILEO GALILEI, del escritor Bertolt Brecht, que me siguen interpelando a casi 40 años de haber dicho en escena el primero y escuchar el segundo. Nuestro mundo es cada vez más uno solo, pero cada vez más se nos revelan las inmorales diferencias entre sus partes. Mientras Galileo elige la salvación individual, Andrea legitima la defensa colectiva.