Entre palabras, listas y otros gazapos nos van a gastar..., como dijo
hace muy poco el Papa Francisco en Bolivia refiriéndose al Sistema.
Pero parece que no acabamos de damos cuenta del significado abarcador
de este desgaste... En fin, concretemos. No recuerdo quién lanzó
primeramente la idea de hacer una lista de la Sociedad Civil
Independentista sin políticos en activo para las próximas
elecciones al Parlament de Catalunya. Sí recuerdo que prácticamente
a todos los partidos políticos y entidades soberanistas les pareció
una buena idea y ésta ya está en la mente de casi todos los que
hemos participado en las ya tantas movilizaciones populares. Y de
pronto -creo que la CUP-, planteó que estaría de acuerdo si esta
lista no formara gobierno y se convocaran luego nuevas elecciones
constituyentes. Luego Mas dijo que habría que definir qué quería
decir “políticos en activo” y que no sabía si no formar un
gobierno podría considerarse “un fraude de ley” y convocó una
cumbre. Después David Fernández expresó que no quería entrar de
nuevo en “cumbres de espectáculo” y se reafirmó en la idea de
que con la pluralidad que reflejaba la realidad independentista del
país sólo podría concebirse una lista de la Sociedad Civil
Independentista sin políticos en activo. Mas dice que habrá que
hablarlo y debatirlo. ¿Qué se hablará y se debatirá en una cumbre
que no sea un espectáculo?
¿Sólo queremos saber cuántos independentistas hay? Ya cualquier
pregunta o respuesta también pueden convertirse en el espectáculo
final que queremos evitar.
Perfectamente podría hacerse una lista independentista con miembros
de la Sociedad Civil sin políticos en activo y que gobierne si gana
las elecciones. A fin de cuentas, aunque algunos digan lo contrario,
principalmente ha sido la Sociedad Civil la que ha llevado sobre sus
hombros la maratón de la Independencia. ¿Por qué no va a saber
gobernar para todos los que vivimos en Catalunya? ¿A qué se le
teme, a que no son políticos? Tal vez sea eso lo mejor: que no sean
políticos y se hagan como tales en el buen gobierno del país al ser
personas como el común de este país.
Quienes gobiernen ahora Catalunya habrán de hacerlo para todos.
Todos quiere decir la inmensa mayoría de todos, y no solamente los
independentistas. Los independentistas habremos dado el gran salto, pero después
del desafío habremos de desaparecer porque todos o la mayoría de
todos seremos independentistas. Y todos significa los intereses del
pueblo. Esos intereses deben ser recogidos en una Lista
Catalunya Independiente. Y es que la tal Lista debe responder a la realidad y
convocar a todos los que vivimos en Catalunya sin exclusiones. Y no
se trata del cálculo de que con unos 200 mil votos más ya es
suficiente. No. La Independencia de Catalunya tendrá alma
catalanista y española o no será. La Independencia de Catalunya
hablará catalán y castellano o no será. La Independencia de
Catalunya habrá de esforzarse mucho por los pobres de esta tierra o
no será. La Independencia de Catalunya será de todos o no será.
Por ello en la Lista Catalunya Independiente deben estar los que, viviendo de
una forma digna, estén dispuestos a compartir la identidad de este
país mezclado y diferente que ha de poner fin a las desigualdades y
separaciones que lo aniquilan. Una Lista con un programa netamente
nacional que cohesione a todos sus habitantes en aras del Bien Común.
Si hay una clara convocatoria a todos, con un programa que garantice
su cumplimiento en defensa de la vida de todos, con una presentación
de los miembros de la Lista donde se haga presente que ya luchan y
seguirán luchando por la dignidad y el bienestar de todos, la
Independencia de Catalunya será un hecho indiscutible, irrefutable e
irreversible.
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